La puerta estaba entreabierta. Poco a poco fue acercando su mano al pomo ensangrentado temiéndose lo peor. Mientras la habitación se iba iluminando tenuemente con el abrir de la puerta, el corazón se le aceleraba, parecía que se le iba a salir del pecho. Un pitido en los oídos no le dejaba escuchar nada, solamente el latido rápido de un corazón nervioso - pum pum, pum pum, pum pum- A medida que avanzaba se sentía más y más nervioso , no sabía que iba a encontrar tras esa puerta. Una gran mancha de sangre en el suelo daba paso a un cuerpo inerte y sin vida. Era un hombre joven, lo había visto un par de veces desde que se había mudado a aquel edificio. Siempre silencioso, siempre oculto, ajeno al resto de vecinos. De pronto un ruido se escuchó tras su espalda, sin darle tiempo a girar nota un fuerte golpe en la cabeza y cae al suelo. Dos cuerpos sin vida en esa pequeña habitación mientras en la negra oscuridad una sombra se deslizaba, rápida y delicadamente, como bailando una danza invisible para alejarse de aquel horrible lugar.
Escrito por Saritalacasita
No sé por qué razón creía que era una mujer en un principio. Supongo que eso es bueno, confundir al lector cuando se trata de misterio, ¿no?
ResponderEliminarAh y la seguiré.
Yo soy @Noa1000words.
Ahora que lo has dicho...es verdad, solo queda claro a mitad de texto. Le preguntaré si es a propósito.
EliminarSeguro que está encantada de que la muestres apoyo ;)
Es que me fue curiosísimo. La he estado siguiendo, pero creo que aun desconoce mi existencia.
EliminarYa me contarás.
Un relato como la misma vida, repentino, sorpresivo, sin tiempo de reacción, y cuyo resultado te deja sin aliento. Genial.
ResponderEliminarMuy buen texto
ResponderEliminar